¡NI MERINO, NI VIZCARRA!: POR LA MOVILIZACIÓN INDEPENDIENTE DEL PROLETARIADO

Hace solo una semana atrás, miles de proletarios se movilizaron convocados por la CGTP, para denunciar la liquidación total de la estabilidad laboral y la estafa de Reactiva Perú, el secuestro de los fondos de pensiones y el lucro con la salud durante la pandemia, la contaminación minera y el lucro con la educación, pero también para denunciar la corrupción tanto del Gobierno del empresario Vizcarra (caso Obrainsa, “Swing”, etc.), como de los congresistas del Parlamento burgués. Lamentablemente, por el desprestigio político de los dirigentes sindicales reformistas, esta marcha obrera no llamó la atención de estudiantes, ambulantes, artesanos y demás secciones de la pequeña-burguesía pobre, que junto con los campesinos pobres, representan la absoluta mayoría del país. Y es precisamente esta masa pequeño-burguesa de la ciudad, la que ahora se está movilizando en rechazo de la vacancia de Vizcarra.

“SOLO VIZCARRA ME REPRESENTA”

Hay que decir las cosas claras: estas marchas son en apoyo del empresario de la construcción Martín Vizcarra. Que este apoyo sea incondicional o “crítico” da lo mismo: lo que se busca es desconocer la vacancia y restablecerlo en su cargo “para que termine su mandato como señala la constitución”. Así, en estas marchas se pueden observar pancartas que dicen “Vizcarra es honestidad, el Congreso corrupción”, “Solo Vizcarra me representa”, “Vizcarra cierra el congreso, tú si puedes”; otras que dicen “Merino no me representa”, “No al golpe parlamentario”, “Investigación sí, vacancia no”, “Derecho a la insurgencia en defensa del orden constitucional”, consignas que muestran claramente el apoyo político a Vizcarra y la Constitución fujimorista, apoyo directo o indirecto, pero apoyo al fin. Ahora bien, ¿qué representa exactamente Vizcarra? ¿qué lo diferenciaría del resto de políticos patronales? Obviamente para los que dicen que es inocente, Vizcarra representaría la honestidad frente a la corrupción. Sin embargo, también hay manifestantes que dudan de Vizcarra o incluso reconocen que es corrupto y, no obstante, lo defienden como “mal menor” frente al (con justicia) desprestigiado Congreso de la República. Pero, ¿en qué aspecto sería, entonces, un “mal menor” si reconocen que también es corrupto?

Muchos manifestantes dicen que con la vacancia el congreso está atentando contra la “estabilidad” política y económica del país. Esta palabra, “estabilidad” (o también “gobernabilidad”), aparece recurrentemente en pancartas y declaraciones. La abogada y periodista Rosa María Palacios (RMP), fujimorista reciclada que viene alentando estas marchas desde el diario La República y las redes sociales, lo ha planteado con claridad en innumerables presentaciones: “La vacancia crea inestabilidad política… la bolsa de valores cae, el dólar se dispara… las inversiones huyen, la comunidad internacional nos abandona… etc.”. Vizcarra representaría estabilidad, la vacancia crearía el caos, la anarquía[i].

En una petición a Change.org que ya tiene más de 100 mil firmas se dice lo siguiente: “En medio de una crisis sanitaria causada por el COVID-19, una crisis económica empeorada como efecto secundario y una crisis social que afecta a las comunidades más vulnerables del país, la mayoría de congresistas peruanos han votado a favor de vacar al presidente Martín Vizcarra. Ahora también tenemos una crisis política originada por la aprobación de la vacancia de Martín Vizcarra movida por intereses personales y políticos propios de los congresistas, a pesar de encontrarnos a cinco meses de las elecciones presidenciales. Ante todo esto, el pueblo queda hundido en la incertidumbre y el miedo de ser liderados por el Congreso de la República, del cual 68 miembros TIENEN PROCESOS DE INVESTIGACIÓN ABIERTOS POR CRÍMENES[ii].

Aquí no se dice que la crisis sanitaria no solo la produce la enfermedad sino un sistema de salud privatizado defendido por Vizcarra (y el Congreso), no dice que la crisis económica capitalista la están pagando los trabajadores gracias a Vizcarra (y el Congreso), no dice que las comunidades más vulnerables están siendo masacradas en beneficio de la minería transnacional por Vizcarra (y el Congreso). No dice que el empresario del Club de la Construcción, Martín Vizcarra, también tiene intereses personales y políticos propios y también está siendo investigado por la propia fiscalía del Estado burgués peruano. Nada de esto se dice, solo se denuncia que la vacancia crea inestabilidad, dejando en “la incertidumbre y el miedo” al pueblo, dando a entender que con Vizcarra había confianza y seguridad.

Esta sería pues la excusa para apoyar al gobierno de Vizcarra: la necesidad de un gobierno fuerte, estable, “predecible” que garantice el orden frente a la adversidad. Se trata de una típica demanda política de la pequeña-burguesía con la que busca compensar la inestabilidad propia de su naturaleza de clase, inestabilidad agudizada con la actual crisis económica y sanitaria. Se trata, asimismo, del argumento clásico para justificar gobiernos autoritarios y golpes militares. Fue el argumento del “anti-parlamentario” Fujimori para justificar su “autogolpe” ante la imparable ofensiva de la hiperinflación y “el terrorismo”[iii]. En situaciones extremas se hacen necesarios gobiernos extremos, dicen. Y los revolucionarios también creemos eso, pero ante la crisis de la (cuasi) democracia burguesa, de sus instituciones (seudo) democráticas, nosotros no proponemos la dictadura presidencialista de la burguesía, sino la dictadura socialista del proletariado. Y esta diferencia de clase es la esencia de la cuestión: ¿quién debe salvar a la pequeña-burguesía de la catástrofe, la burguesía o el proletariado?[iv]

VIZCARRA COMO MAL MENOR

Los dirigentes oficiales de la clase obrera (socialdemócratas, estalinistas, falsos trotskistas, etc.) nos han venido diciendo que ciertos gobiernos burgueses pueden ser una alternativa, un “mal menor” en el “largo camino hacia el socialismo”. Esto explica su apoyo a Toledo, a Humala, y ya en su decadencia, a PPK y Vizcarra. Estos dirigentes sostuvieron por izquierda el frente político “No-a-Keiko” encabezado por Vizcarra, apoyaron su engañosa persecución judicial al partido fujimorista, su referéndum demagógico, y finalmente, su golpista cierre parlamentario: “Este cierre del congreso es en realidad la última gran maniobra del empresario Vizcarra en pos de salvar desesperadamente la farsa democrática. Se convocarán nuevas elecciones y las mismas mafias políticas burguesas volverán a entrar al congreso… Pero habrá quedado un nefasto e imborrable precedente para futuros golpes cívicos-militares[v]. Esto fue lo que publicamos hace un año atrás, y (lamentablemente) los hechos nos están dando la razón.

¿Son, entonces, estas marchas reaccionarias? ¡Por supuesto que sí! Son marchas políticas, no “económicas”. Y su contenido político es el apoyo a un empresario corrupto, no importa bajo qué excusa se justifique esto. Siempre existirá algo políticamente peor que sirva de pretexto a los oportunistas para apoyar a un capitalista como “mal menor”. Esta es la historia trágica de todas las derrotas históricas del proletariado. Pero una cosa es un militar “nacionalista” como “mal menor” el 2006 y otra un banquero como PPKeiko el 2016. E incluso una cosa es Vizcarra al inicio de su improvisado mandato, y otra este Vizcarra, de los ceses colectivos, masacres policiales y corrupción comprobada. Las marchas de hoy en apoyo a Vizcarra en estas condiciones son, por tanto, más reaccionarias aún que las pasadas movilizaciones del movimiento liberal “No-a-Keiko”, movilizaciones que los trotskistas del NRCI jamás apoyamos, movilizaciones que provocaron justamente lo contrario a sus “intenciones”: el indulto de Fujimori de manos de PPK[vi].

En esas movilizaciones la consigna principal era la lucha contra la corrupción, dado que contra Vizcarra no se habían publicado aún las pruebas contundentes que hoy se conocen. En las actuales movilizaciones la consigna principal es otra; se trata de recuperar la “estabilidad” perdida como dice el periodista liberal Marco Sifuentes. Este reconoce que contra Vizcarra existen pruebas contundentes que lo llevarían a prisión, pero sea como sea es necesario en el cargo, y para explicar mejor esto Sifuentes cita incluso una frase del ex presidente autoajusticiado Alan García: “un político sobre todo debe ser útil a la gente[vii]. Es decir, así como García, Vizcarra “roba, pero hace obra”. A este nivel han descendido los argumentos políticos en este país.

Como serán de reaccionarias estas marchas que no solo defienden la inocencia o necesidad política de Vizcarra, sino que además respaldan abiertamente su política frente a cuestiones tan sensibles a los trabajadores como la economía, la educación, o la salud.

Mientras que el 5 de noviembre los obreros de la CGTP marcharon para denunciar la liquidación de la estabilidad laboral gracias a despidos masivos que imponen el hambre a millones, RMP nos advierte que con la salida de Vizcarra “perdemos” la estabilidad económica que goza el país (o mejor dicho la burguesía). Mientras que los pensionistas marcharon por la devolución (desesperada) de sus jubilaciones en manos del Estado patronal, RMP nos advierte que el congreso de Merino está preparando una ley populista para permitir esta devolución, concesión que “quebraría las finanzas públicas”. Mientras los trabajadores de la salud marcharon para denunciar el lucro con la pandemia de manos del monopolio farmacéutico protegido por Vizcarra, RMP nos advierte que con la vacancia entramos en la “anarquía sanitaria” precisamente cuando alcanzamos una de las tasas de letalidad más altas del mundo. Mientras que algunos estudiantes y maestros marcharon para reclamar el fin de las evaluaciones-despido y lucro con la educación impuestos desde las UGEL y la SUNEDU, RMP nos advierte que este “golpe parlamentario” tiene por finalidad traer abajo la ley universitaria de Humala y el general Mora, ley que justamente profundizó la privatización de la educación[viii] iniciada con la dictadura fujimorista que la misma RMP defendió en su momento[ix].

No sería, entonces, exagerado decir que estas marchas pequeño-burguesas contra el Congreso, pero en apoyo de Vizcarra están en directa oposición a la movilización proletaria del 5 de noviembre contra Vizcarra y contra el Congreso.  

“¡PERO NO TODOS APOYAN A VIZCARRA!”

Ahora bien, algunos dirán que estamos simplificando las cosas y que, junto con estas consignas en apoyo a Vizcarra, también se pueden observar consignas en favor de la Asamblea Constituyente e incluso contra el mismo Vizcarra. Es cierto. Pero nosotros sabemos quienes son los que están llevando estas consignas a un movimiento que abiertamente está reclamando el regreso de Vizcarra. En Trujillo, por ejemplo, la dirigente del partido patronal “feminista” Nuevo Perú llamó a la movilización ciudadana bajo la consigna “investigación sí, vacancia no”, una consigna que defiende la necesidad de que Vizcarra permanezca en el cargo (por lo menos) hasta las próximas elecciones. Esta misma activista levantaría al mismo tiempo la consigna “derechos laborales, nueva Constitución[x]. Obviamente, no es muy difícil unir las dos frases: ¡Vizcarra, convoca la Constituyente para defender los derechos laborales! Es decir, se le está pidiendo al gobierno fujimorista de Vizcarra que ha profundizado la política esclavista de la actual Constitución, que permita su liquidación. ¿No se trata acaso de un burdo fraude para sembrar ilusiones en un mafioso más del Club de la Construcción? Anotemos como dato final que la señora Pérez no acudió a la convocatoria de la CGTP por los derechos laborales.

En Lima, Arequipa y otras ciudades, también hemos podido identificar a varios grupos de izquierda llevando pancartas muy rojas a estas manifestaciones reaccionarias. Según dicen, es para “reorientar” estas movilizaciones hacia una lucha por objetivos más elevados. Aquí estamos frente a la enésima versión de la “revolución por etapas”, es decir, de la trampa que impuso el estalinismo al proletariado para evitar que tome el poder donde estaba en condiciones de hacerlo. “Primero debemos traer abajo a Merino, restituir en el poder a Vizcarra con el apoyo de la OEA; luego este nos devolverá el favor convocando una Asamblea Constituyente como en Chile, para finalmente, luego de esta Asamblea, dar inicio a la lucha por el socialismo; es un proceso de cambio como en Bolivia… ”, así más o menos es el pensamiento del reformismo, reducido a su mínima expresión luego de que el Frente Amplio votara a favor de la vacancia de Vizcarra, quedando expuestos ante el pueblo como uña y carne del podrido congreso capitalista que les da de comer.  

Lo que estos reformistas están ocultando es que una de las principales promotoras de estas marchas es RMP, la misma que nos prometió hace unos años que PPK no indultaría a Fujimori. Esta topo del fujimorismo ha incluso invocado el artículo 46 de la Constitución fujimorista para justificar la legalidad de una “insurgencia” en defensa de esta misma constitución. Lo curioso es que “olvida” o nos hace olvidar que esta constitución es absolutamente ilegal según los mismos principios jurídicos burgueses que dice defender, porque esta constitución del 93 se la dictaron a los juristas los golpistas del 92. “Olvida” que este artículo subversivo lo plagiaron de la Constitución del 79, nacida de una Asamblea Constituyente y que, en todo caso, la única constitución que legalmente podría ser defendida es precisamente la “velasquista” del 79 y no la fujimorista del 93. Pero los abogados del liberalismo son así, redefinen los principios de su ciencia según la ocasión.

No se puede, entonces, injertar la consigna “Nueva Constitución” en una movilización que se realiza en defensa del actual “orden constitucional”. ¿O acaso no están demandando los manifestantes el pronunciamiento determinante del Tribunal Constitucional? Estas marchas no tienen, así, nada en común con la lucha del proletariado chileno, lucha que empezó contra el alza del costo de vida, reclama el fin de la desigualdad capitalista y está combatiendo al empresario Piñera, aliado del empresario Vizcarra[xi]. Ahora se pretende llevar a la derrota a nuestros hermanos de clase de Chile reemplazando su lucha contra Piñera con la trampa de la Asamblea Constituyente convocada por el mismo Piñera, así como los reformistas traicionaron la lucha de los explotados peruanos subordinándolos a la Asamblea Constituyente del militar Morales Bermúdez a fines de los 70. ¡Solo el proletariado, ejerciendo su dictadura sobre la burguesía, puede realizar una verdadera Asamblea Constituyente que le de tierra al campesino y territorio a las nacionalidades oprimidas!

Lo que están haciendo los reformistas es repetir el mismo discurso con el que sostuvieron el cierre golpista del Congreso el año pasado. Según ellos este cierre reaccionario fue un “triunfo democrático” que inauguraba una era de luchas democráticas en el Perú hasta la conquista de la Asamblea Constituyente. Nada de esto sucedió, por el contrario, la reacción se fortaleció, para el nuevo Congreso fueron votados partidos ultra-reaccionarios como el FREPAP[xii], y Vizcarra, obviamente, acrecentó su popularidad, popularidad que aún mantiene a pesar de las pruebas y luchas en su contra, y que explica finalmente estas movilizaciones reaccionarias en su apoyo. Estas movilizaciones no pueden desembocar en un Congreso Constituyente, precisamente porque no solo son contra estos congresistas sino contra todo Congreso; no son solo contra estos partidos políticos, sino contra todo partido político; no solo son en favor de este presidente sin partido, sino en defensa de la Presidencia de la República como institución bonapartista. Vizcarra no creó su bancada precisamente por esto, para poder mantener su popularidad como caudillo anti-parlamentario de la nación.

El apoyo por izquierda a estas movilizaciones, intentando injertarles consignas democráticas, anarquistas y hasta socialistas, solo puede cumplir el mismo rol que han venido cumpliendo desde los tiempos de las marchas del “No-a-Keiko”: fortalecer a la reacción, crear confusión en los explotados y liquidar la más mínima independencia política de clase.

“¡PERO TODA LUCHA DE MASAS ES PROGRESIVA!”

Los reformistas nos objetan: toda lucha de masas es progresiva, desconocerlo es sectarismo. ¿Es cierto esto? ¡Absolutamente no! El año pasado nada más hubo en Bolivia una movilización masiva, “popular”, de gente humilde, encabezada por el empresario Camacho, y demandando a los militares y policías su intervención para sacar del poder al gobierno “indígena” de Evo Morales[xiii]. En Venezuela hemos visto también movilizaciones masivas de la pequeña-burguesía pidiendo la intervención militar de EEUU contra Maduro[xiv]. A fines del 2013, en Ucrania, hubo también una movilización enorme de estudiantes, comerciantes y desocupados, encabezada por milicias neonazis, movilización que impuso un régimen de transición fascista en este país ex soviético[xv]. Es que la pequeña-burguesía no puede tener una posición independente: si no la acaudilla el proletariado hacia la revolución, puede caer presa de la demagogia populista en dirección a la contrarrevolución. Y esto es lo que está ocurriendo ahora en Perú, las masas están pidiendo el cierre golpista del Congreso al punto que si esta acción la realizaran hoy los militares tendría su apoyo o, en el mejor de los casos, su neutralidad.

Lo que están haciendo los oportunistas es satisfacer la esencia de su vocación: dejarse arrastrar por la corriente. Contra esta miserable postración política ya Lenin nos advertía:  “¿No será más decoroso también para los internacionalistas saber oponerse en un momento como éste a la embriaguez «masiva» que «querer seguir» con las masas, es decir, contagiarse de la epidemia general? ¿Es que no hemos visto en todos los países beligerantes europeos cómo se justificaban los chovinistas con el deseo de «seguir» con las masas? ¿No es obligatorio, acaso, saber estar en minoría durante cierto tiempo frente a la embriaguez «masiva»? ¿No es precisamente el trabajo de los propagandistas en el momento actual el punto central para liberar la línea proletaria de la embriaguez defensista y pequeñoburguesa «masiva»? Cabalmente la unión de las masas, proletarias y no proletarias, sin importar las diferencias de clase en el seno de las masas, ha sido una de las premisas de la epidemia defensista. No creemos que esté bien hablar con desprecio de «un grupo de propagandistas» de la línea proletaria.[xvi] Esto lo decía Lenin contra los oportunistas que capitularon en la Primera Guerra Mundial, y esto mismo les hicimos recordar a los oportunistas que este año boicotearon el Primero de Mayo para “protegernos del virus” y ahora marchan a pesar del virus porque las masas están marchando.  

Es que así son los oportunistas; necesitan desesperadamente likes, votos, “masas” para existir, no pueden criticarlas, no pueden cuestionar sus consignas, sus motivaciones; deben adaptarse a sus vacilaciones, a sus retrocesos, a su confusión temporal.

Como será de cierto esto, que ahora vemos al prestigioso periodista César Hildebrandt, defender a Vizcarra del “golpe parlamentario” luego de presentar durante meses pruebas de corrupción en su contra[xvii]. También vemos a Nuevo Perú denunciar que Merino ha designado como Premier a uno de los responsables de la masacre de Bagua, a solo unos meses de haber firmado su alianza electoral con el ex Premier de Alan García, Yehude Simon, responsable directo de este genocidio[xviii]. Como será de cierto esto, que vemos como Lenin Bazán del Frente Amplio se ha solidarizado con las marchas contra la vacancia… ¡luego de votar a su favor![xix] Lo mismo está intentando el falso trotskista Fernández Chacón luego de votar también contra Vizcarra, todo con la finalidad de montarse a última hora en un movimiento cuyo triunfo definirá seguramente su tan preciado futuro electoral[xx]. Así pagan caro los oportunistas el precio de dejarse llevar (casi) siempre por la corriente. Calcularon mal, creyeron que la corriente iría contra Vizcarra luego de la gran marcha del 5 noviembre, realizada rompiendo con la cuarentena militar que llamaron a acatar. Calcularon mal y se ahogaron nadando en contra. Ahora son simplemente fantasmas que penan en las movilizaciones gritando consignas que nadie escucha, fantasmas políticos que buscan resucitar poniéndose a la cola de un movimiento reaccionario que (con justicia) los desprecia[xxi].

Debe quedar claro que no estamos definiendo estas marchas como reaccionarias por estar encabezadas por reaccionarios como el sionista Julio Guzmán y sus parlamentarios que votaron contra la vacancia. Es al revés: debido al carácter reaccionario de estas marchas es que este nuevo caudillo presidencial la está encabezando. En otras ocasiones, incluso revoluciones proletarias han sido subordinadas por sus dirigentes traidores a representantes de la burguesía (nativa) como Hugo Chávez o Evo Morales. En estos casos, las marchas de obreros y campesinos pobres deben ser apoyadas incondicionalmente porque objetivamente combaten al capitalismo mundial aun cuando sus direcciones se esfuercen por contenerlas y hacerlas retroceder. Estas marchas sí podrían en su desarrollo romper con la burguesía y destruir su Estado y sistema económico, siempre y cuando una dirección revolucionaria internacional se ponga a su cabeza. En el caso de marchas pequeño-burguesas como las de Venezuela en favor de Guaidó, o las de Perú en favor de Vizcarra, es imposible este desarrollo revolucionario. Apoyarlas como hacen ciertos grupos reformistas, es simplemente hacerle el juego a la reacción internacional.

¡POR UNA VERDADERA INDEPENDENCIA POLÍTICA DE CLASE!

Aquí solo la movilización INDEPENDIENTE del proletariado puede empezar a librar a las masas pequeño-burguesas pobres del virus vizcarrista. Justamente movilizaciones como las del 5 de noviembre, empezaban a construir esta alianza para una lucha de todos (los explotados) contra todos (los explotadores). La pequeña-burguesía necesita una dirección, justamente por esto el proletariado debe ofrecérsela con acciones y consignas distintas y opuestas a su movilización reaccionaria inducida por la burguesía.  

Mientras estas marchas piden el regreso de Vizcarra, el proletariado debe rechazar abiertamente todo apoyo a Vizcarra, Guzmán, Antauro Humala o cualquier otro caudillo burgués oportunista. Contra las consignas a favor de la estabilidad económica que les garantizaría Vizcarra, hay que denunciar la inestabilidad laboral que nos ha impuesto, ocupando todas las fábricas que despidan trabajadores, expulsando a sus administradores y supervisores para ponerlas bajo control de comités obreros. Contra sus consignas en favor de la SUNEDU, debemos llamar a su liquidación como órgano de la privatización, no para favorecer a las universidades-fachada del narcotráfico, sino para estatizar todo el sistema educativo sin pago y bajo control de sus estudiantes, para poner fin de una vez por todas al lucro con la educación. Contra sus consignas en favor de la política sanitaria de Vizcarra, debemos llamar a la expropiación sin pago y bajo control obrero de farmacias, clínicas y fábricas de oxígeno para salvar la vida de nuestros enfermos. Contra su consigna de “derecho a la insurgencia para defender la constitución” (fujimorista), debemos agitar el derecho de los explotados a armarse contra los explotadores como en Bagua, reivindicando los derechos económicos y políticos de soldados rasos y reservistas. Contra la defensa del orden constitucional y la democracia fujimorista violada por la vacancia, debemos llamar a tumbar todas estas instituciones de la CONFIEP, su casta de oficiales y su Constitución golpista, su Tribunal Constitucional y su Presidencia de la República, nido del militarismo y la reacción[xxii], levantando la consigna de Asamblea Constituyente Revolucionaria, cuya realización no podemos confiar jamás a ningún gobierno burgués así se pinte de “antiimperialista”[xxiii].

Es decir, debemos levantar estas y otras consignas democráticas y de transición manteniendo la más absoluta independencia política de clase, orientación táctica que permitirá combatir este movimiento reaccionario y despejará el camino para el desarrollo de la revolución socialista. No debemos olvidar también el llamado a los campesinos pobres retomando la lucha por la nacionalización sin pago de los recursos naturales, la confiscación de la tierra para el que trabaja, la expropiación de la banca usurera y la destrucción de los tratados, deudas y bases militares del imperialismo. Cuando los campesinos pobres vean que las movilizaciones no son a favor del pro-minero Vizcarra sino en su contra e incluso en contra de los campesinos ricos de CONVEAGRO representados por el Frente Amplio y en contra del genocida de Bagua Yehude Simon aliado de Verónika Mendoza, se movilizarán ellos también. Hoy no lo están haciendo porque saben que Vizcarra los masacró hace poco en Espinar, y tampoco es casualidad que las ciudades donde estas marchas son más fuertes son justamente las ciudades donde triunfó Keiko o PPKeiko el 2016 (Lima, Trujillo, Cusco, Arequipa, etc.). En la lucha independiente de los obreros y campesinos pobres está la verdadera salida para las masas de la ciudad. ¡Abajo las marchas reaccionarias en favor de Vizcarra! ¡Paso a la movilización independiente del proletariado! ¡Una sola lucha a nivel internacional contra la reacción imperialista y el nacionalismo burgués!

Esta agitación revolucionaria solo la puede realizar de forma sostenida y consecuente una dirección internacional revolucionaria. Los trotskistas del NRCI seguiremos peleando a muerte por refundar nuestro partido, la Cuarta Internacional, contra todos los oportunistas, contra sus consejos y advertencias, contra sus acciones y consignas, contra sus teorías y programas. Nosotros no vamos a dejarnos arrastrar por la ola, no vamos vestir el traje de moda, no vamos a adaptarnos a la confusión de la pequeña burguesía; nosotros tenemos principios que no son abstractos: nos aferramos también a los hechos, pero no solo los hechos del presente, sino también los del pasado y sobre todo los del futuro glorioso que está reservado solo para los que puedan anticiparlo.

¡ABAJO MERINO, ABAJO VIZCARRA!

¡ABAJO LA CUARENTENA MILITAR DEL HAMBRE!

¡LARGA VIDA A LA REVOLUCIÓN SOCIALISTA MUNDIAL!


[i] https://www.youtube.com/watch?v=pT_DfYadH4I&t=1s

[ii] https://www.change.org/p/tribunal-constitucional-rechazamos-vacancia-del-presidente-martin-vizcarra-rechazamos-este-golpe-de-estado?fbclid=IwAR2B1S1qiBlNIzQJd7IPv0g6pCOklmFmaV_-CLZJgqqCi2elPrpyw7ZObn0

[iii] https://zonaobrera.wordpress.com/2017/10/27/contra-la-persecucion-politica-a-las-organizaciones-de-los-trabajadores/

[iv] https://www.marxists.org/espanol//trotsky/ceip/escritos/libro4/T06V108.htm

[v] https://zonaobrera.wordpress.com/2019/09/30/deben-los-trabajadores-apoyar-el-cierre-del-congreso/

[vi] https://zonaobrera.wordpress.com/2017/12/22/triunfo-de-la-impunidad-con-votos-de-fujimoristas-y-apristas/

[vii] https://www.facebook.com/106275272804931/posts/3333892916709801/

[viii] https://zonaobrera.wordpress.com/2016/12/14/mitos-sobre-la-ley-universitaria-mora-humala/

[ix]https://www.youtube.com/watch?v=AbWsxXjbn6Y&fbclid=IwAR3_eAZ67EgeSiyjRg2HfqvcdhltAglohA1kXgdDyL0DjBabABwoNUqVMZM

[x] https://www.facebook.com/1901577433441065/videos/419732529193221

[xi] https://nrci.org/blog/2019/10/25/viva-la-lucha-del-pueblo-pobre-de-chile/

[xii] https://zonaobrera.wordpress.com/2020/03/07/la-multiplicacion-de-los-peces-con-mucho-pan-que-rebanar/

[xiii] https://nrci.org/blog/2020/01/11/bolivia-abajo-el-gobierno-golpista-de-jeanine-anez/

[xiv] https://nrci.org/blog/2019/02/12/abajo-la-ofensiva-imperialista-sobre-venezuela/

[xv] https://nrci.org/blog/2014/06/01/la-verdad-sobre-la-crisis-de-ucrania/

[xvi] https://www.marxists.org/espanol/lenin/obras/oe12/lenin-obrasescogidas06-12.pdf

[xvii] https://www.facebook.com/semanariohildebrandtensustrece/posts/3434980309883288

[xviii]https://web.facebook.com/movimientonuevoperu/photos/a.241179462990483/1062407837534304/

[xix] https://www.facebook.com/rppnoticias/posts/10160395512721754

[xx] https://zonaobrera.wordpress.com/2020/10/23/vizcarra-es-la-confiep-abajo-el-estado-patronal-corrupto/

[xxi] https://www.facebook.com/1684565465150126/posts/2800947570178571/

[xxii] https://ceip.org.ar/Un-programa-de-accion-para-Francia

[xxiii] https://ceip.org.ar/Por-una-estrategia-para-la-accion-no-para-la-especulacion

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